Hay un rincón en las Fragas do Eume que a menudo pasa desapercibido, pero que vale la pena conocer. Su fácil acceso no admite excusa alguna. Cualquiera puede detenerse en la carretera AC-141 que desciende hacia la antigua Central de A Ventureira y visitar el Parque Etnográfico del Río Sesín, un hermoso paseo de un par de kilómetros por una senda cómoda y agradable bajo una hermosa cúpula arbolada, que transcurre junto a los dos molinos perfectamente conservados del principal afluente del río Eume.
A través de este eco-museo al aire libre, podremos descubrir el beneficio natural que, no hace tanto tiempo, el hombre extraía de las fragas, por medio de los molinos de agua, la recogida de castañas o la utilización de la corteza de los robles, y que hacen comprender el motivo por el cual era el primer ser en interesarse por su cuidado.
Afortunadamente ninguno de estos rincones de ensueño, donde el agua discurre fresca y clara a través de numerosos saltos en su viaje hacia el gran río, fue víctima del fuego. Afortunadamente, en estos rincones intactos todavía parece posible tropezarse con una dríada en cualquiera de sus laureles o castaños.
3 comentarios :
Desde luego es un sitio precioso.
Estupendas fotos.
Un saludo.
Areku Desings
Brush Art Designs
Preciosas imágenes Silvia, de uno mas de esos maravillosos lugares que forman las Fragas del Eume
Me lo apunto como excursión para el verano próximo. Por las fotos que muestras tiene muy buena pinta.
Saludos.
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